Nota: El siguiente artículo analítico busca explicar desde una perspectiva de estrategia de marca el resultado de las elecciones y no expresa nuestro punto de vista ideológico. (No hacemos estudios de opinión pública y tampoco nos interesa hacerlo).

Los resultados de las PASO 2023 parecieran haber dejado boquiabiertos a la mayoría del electorado. En este artículo, no busco exponer un análisis acabado; por el contrario, solo quiero agregar un punto de vista, una lectura más de por qué pasó lo que pasó.

Seguramente, alguna vez escuchaste hablar de la famosa pirámide de Maslow, una teoría propuesta por Abraham Maslow que se publicó en 1943. La misma afirma que hay una jerarquía de necesidades que van desde las más básicas hasta las más sofisticadas.

A medida que las personas satisfacen sus necesidades básicas, pueden ir evolucionando de manera progresiva en su desarrollo personal. Básicamente, es difícil buscar satisfacer necesidades de autorrealización si hace días que no como y no pude pagar el alquiler.

Entendiendo que cada partido analiza los indicadores macro, contexto político, índices de seguridad y violencia, decide construir un discurso acorde. ¿Por qué no hacer el ejercicio de entender cómo está cada partido en función de cada una de estas variables?

Necesidades fisiológicas: Estas son las necesidades más básicas y esenciales para la supervivencia, como el alimento, el agua, el refugio y la ropa.

Necesidades de seguridad: Una vez satisfechas las necesidades fisiológicas, las personas buscan sentirse seguras y protegidas, tanto física como emocionalmente. Esto incluye la seguridad laboral, la salud y la protección contra peligros.

Necesidades de pertenencia y afecto: En este nivel, las personas anhelan el sentido de pertenencia, la interacción social y las relaciones afectivas. Esto puede manifestarse en la búsqueda de amistades, relaciones amorosas y conexiones familiares.

Necesidades de estima: Las personas buscan ser valoradas y respetadas tanto por sí mismas como por los demás. Esto incluye el reconocimiento, el prestigio, la autoestima y la autoconfianza.

Necesidades de autorrealización: En la cima de la pirámide se encuentran las necesidades que implican el deseo de alcanzar todo el potencial personal y lograr un sentido profundo de satisfacción y cumplimiento. Esto puede manifestarse en la búsqueda de metas personales, creatividad, autodescubrimiento y contribución al bienestar.

Si observamos cuánto tiempo han dedicado los candidatos a cada categoría, veremos que el ganador le ha dedicado mucho más tiempo a la principal preocupación de los argentinos. La economía atenta directamente contra las necesidades fisiológicas y de seguridad.

Es interesante observar que mientras el candidato ganador dedicó gran parte de su campaña a la categoría de economía, renovando las esperanzas en el 50% NSE bajo, el oficialismo presenta un discurso más fragmentado, donde tiene que dispersar el tiempo para atender a cada uno de los segmentos “minorías” convertidos en banderas políticas.

Históricamente, la sumatoria de segmentos “minorías” venía siendo una estrategia que al oficialismo le ha servido fuertemente. Sin embargo, en un contexto donde el 50% de la población es pobre, el futuro está coartado.

El 50% tiene ingresos diarios o semanales. El promedio de ingresos familiares puede rondar los 140 mil pesos. El 70% si un día no puede trabajar, no cobra, no come.

El futuro no existe, proyecta el día a día, en aras de subsistir. La comida de todos los días no está garantizada. El deseo está ausente, lo cotidiano se lleva todo el anhelo posible. Buscan estar bien con lo puesto: cortarse el pelo o hacerse las uñas es “todo un evento”.

Antes de la pandemia, aspiraban a las grandes marcas, pero sintieron su abandono. Las nuevas primeras marcas son las que nacieron pensadas para la base de la pirámide. Se rigen también por la ecuación de valor de conveniencia, donde el valor existe en tanto y en cuanto le presenten una solución.

Tienen nula formación financiera porque nunca tuvieron mucho que gestionar. Cualquier excedente se convierte en productos alimenticios y materiales.

El otro 45% son los temerosos del futuro. Este segmento tiene ingresos familiares que rondan los 385 mil y el piso de ingresos para este segmento es de 243 mil aproximadamente.

Empiezan a ver el futuro con preocupación, están atentos al contexto y saben que están en riesgo. Se pone en manifiesto que lo que quieren alcanzar probablemente no lo puedan lograr.

Se rige principalmente por la ecuación de valor de conveniencia para tomar decisiones. Restringen los gimnasios y actividades sociales. Aumenta los consumos en el hogar. Hay menos salidas, pero más pedidos y renovaciones que colaboren con el disfrute en casa.

Tienen formación financiera limitada, por lo que intentan ahorrar en dólares, plazos fijos UVA, empiezan a coquetear con CEDEARS y FCI gracias al trabajo de las fintechs y los extras intentan gastarlos en gustos que saben que no podrán darse en el futuro y en inversiones caras como zapatillas y algunos viajes.

Luego de las PASO queda expuesto que uno de los candidatos acierta en las necesidades de la parte baja de la pirámide de Maslow, mientras que el otro está perdido en el lenguaje simbólico de las clases medias. Finalmente, el consumo valida el status de situación personal de cada individuo y el cuadro de situación no es bueno para la mayoría. ¿Cambiarán los discursos?

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